Por motivos personales durante este último año mi vida ha estado vinculada a Alemania, al mundo del automóvil y a los vuelos a Munich. Hace pocos días hice un viaje muy especial desde Ingolstadt hasta Sant Pol de Mar. De Baviera al Mediterráneo, 1.500 kilómetros llenos de simbolismo que cerraban un ciclo.
En varios viajes a Alemania he conocido muchos lugares y momentos de los que guardo muy buen recuerdo, como mi visita un frio día de diciembre al Castillo de Nüremberg, las dos helles que me tomé un cálido día de verano en una terraza al lado del Danubio en Neuburg an der Donau o la inolvidable visita el Castillo del Rey Loco, Neuchwanstein tras un divertido viaje en coche consultando un mapa 1.0 .. De hecho tantos son los lugares que creo que los tendré que enumerar en un próximo post. Será mi guía de recuerdos alemanes.
Mi viaje empezaba en el momento en el que me subí al avión de Vueling en Barcelona ( Viaje que como casi todos los que suelo hacer con esta compañía, fue acompañado con una Estrella Galicia para sobrellevar la tensión ) Y terminaba cuatro días más tarde en Sant Pol de Mar, con un coche lleno de cajas, maletas y recuerdos aparcados en el garaje.
#FromIngolstadtToSantPol estos son algunos de los lugares y momentos que hicieron especial este viaje:
Mi Hotel favorito en Munich: Eurostars Grand Central
Se ha convertido en mi segunda casa en Alemania. La recepcionista que siempre nos ha atendido allí, el bar y sus deliciosos “club sándwich”, las modernas y comodísimas habitaciones y el inolvidable desayuno. Los fines de semana acompañados de música de violín y guitarra en directo. Un buffet completísimo y con productos de gran calidad y en gran cantidad. Recomendable 100%.
Inmersión en el BMW Welt ( Munich )
Aunque yo soy más de Audi, aproveché para ir a visitar este museo, imprescindible para todos los amantes del motor. Toda la historia de la marca ( empezó fabricando motores de aviones ) concentrada en este museo en el que pasar horas de contemplación. Además de un concesionario hay restaurante y tienda…¡y wifi gratis en todo el recinto!
Paseando por el Englischer Garten ( Munich )
Sólo pude ver una pequeña parte de este fastuoso lugar, uno de los parques urbanos más grandes del mundo. Era la hora de comer, así que aprovechando el sol, me hice hueco en uno de sus Biergartens para disfrutar de la gastronomía típica junto con una refrescante cerveza. En el paseo que di después no tuve tiempo ni de ver una cuarta parte del parque pero me fije en un detalle que me encantó: en muchos de los bancos que rodeaban el lago había placas con mensajes , recuerdo de las historias que las que fueron protagonistas. Y me dio por imaginar…
Gastronomía bávara
Hablando de Biergarten y gastronomía, me confieso una auténtica enamorada de los Brezeln, las Bratwurst y de los Biergarten en general .En Munich hay un lugar muy famoso, Hofbräuhaus ,típico guiri, al que fui una vez para probarlo. Y me llegó. Justo enfrente descubrí hace tiempo un restaurante con mejor comida y menos aglomeración de gente : Ayinger Hof .El servicio un poco lento pero nada que ver con HB. Un buen lugar para probar la cocina bávara.
Audi Forum Ingolstadt : el Brunch perfecto
Lo descubrí en mi primer viaje a Ingolstadt, donde está la sede central de Audi, y no he dejado de visitarlo cada vez que he vuelto. Su restaurante de desayunos / Brunch es el más espectacular que he visto con diferencia. La presentación y la calidad de los productos bien merecen la visita. Recomendado para amantes de la gastronomía y la marca, puedes desayunar mientras ves coches de todos los modelos aparcados delante. Además, el Audi Museum ( bastante más pequeño que el BMW de Munich ) está justo al lado y el concesionario de la marca. Me gusta ver siempre la hilera de coches esperando a que los vayan a recoger sus dueños y el ritual que siguen para entregárselos. Y la tienda, de la que siempre termino trayéndome algo.
Cruzando el Lago Constanza
Un día de diciembre cuando ya ha oscurecido; una carretera que piensas que te lleva a un puente y que desemboca realmente en un trasbordador que te lleva al otro lado del lago. En el recorrido, te enamoras del pueblo en el que coges el trasbordador, Meersburg, y del pueblo de destino, Constanza. Y te juras a ti misma que volverás. Pues volví a cruzar el lago, esta vez de día, y volví a hacerme la promesa de volver para conocer esos dos lugares tan idílicos con calma. Anotados en mi lista.
Basilea , el destino marcado
El alto en el camino. Era un destino marcado en mi ruta al que sabía que algún día iría. Y ese día llegó. Mi conductor favorito ( el que me llevaba en este viaje) tiene una relación especial con esta ciudad ya que sus padres fueron de los muchos que tuvieron que emigrar fuera de Galicia para buscar una mejor vida. Con el tiempo volvieron a su Lugo natal, pero siempre guardaron un bonito recuerdo Basilea. Para nosotros fue un descubrimiento esta ciudad. Me supo a poco la visita porque solo su casco histórico merece perderse en él un día por lo menos. Muchos rincones únicos y un encanto especial en el aire. Y unas vistas espectaculares desde la habitación del Hotel Ramada Plaza y desde su SkyLounge en la planta 30. Tomar una cerveza viendo atardecer desde una de sus mesas es algo que seguro que repetiré.
Desde Suiza hasta el Mediterráneo
Mi viaje fue dejando kilómetros, paisajes alpinos, lagos y recuerdos atrás. Crucé Francia sin apenas detenerme. Vuelta al Mediterráneo y planes para un próximo viaje.
#FromIngolstadToSantPol
Durante el viaje:
• Mientras duró la cobertura, mi emisora de radio de cabecera fue Antenna Bayern.Me enganchó tanto su música que ahora la escucho por internet desde casa.
• Ingentes cantidades de galletas príncipe fueron devoradas
• La lista de lugares pendientes de visitar fue incrementando
• Me dí cuenta de que, después de todo, Alemania no estaba tan mal. Volveré.
Dedicado a Alfonso.