Un sendero al lado de un río. Lluvia intensa. Invierno. Obstáculos que superar. Bajo los árboles un alma en pena lo recorre pensando en la similitud de ese camino, que parecía fácil pero se ha complicado debido a su torpeza, con el dolor que carga sobre sus hombros.
Esta vez la historia es real y la persona que andaba con paso firme bajo la lluvia era yo.
Una semana de invierno en Galicia puede resultar reparadora. A pesar de la lluvia, a pesar del frio. Galicia es el lugar ideal para visitar en invierno cuando el invierno se apodera del alma.
Senderismo en Ribeira de Piquín
Pasear por el bosque pisando una alfombra de hojas secas, entre paredes de troncos desnudos, escuchando el sonido de la naturaleza. Y los propios pensamientos. Soledad. Es una sensación reconfortante que viví una mañana paseando por la Ruta dos Portelos, que lleva a una hermosa cascada cerca de San Jorge.
Esa tarde , una tormenta asoló la zona, pero no me impidió hacer otra ruta , la del Muiño de García, desde Chao de Pousadoiro hasta Os Cangos. Varios kilómetros de paseo junto al rio, bajo el agua de la lluvia. Terminé empapada pero los rincones que descubrí en ese paseo me dejaron sin palabras. Ahora solo espero recorrerla un día de sol en el cielo ( y en mi alma ). Y con los mismos guías para que vean que soy una “chica de monte” ( Gracias Luis y Roberto )
Tengo la teoría de que lo que hace especial a un lugar es la persona con la que lo visitas.
Mondoñedo by Night
Había visitado Mondoñedo un par de veces y no me había llamado especialmente la atención. Pero una inusualmente cálida tarde de domingo en pleno invierno con dos guías de lo más divertidos obró el milagro. Después de visitar la Catedral, una cerveza en un bar enfrente esperando a Luz y a Antón de Casa do Batán. Y tras los abrazos ,el reencuentro y las fotos de rigor con la estatua Cunqueiro ( momentazo ) empezó la fiesta.
Cuenta la leyenda que todas las personas que se alojan en Casa do Batán sienten la magia que desprende al cruzar el puente de acceso. Desde ese día yo creo que ellos son los que la hacen mágica. Es asombroso su poder de hacerte desconectar y cambiar el ánimo con solo estar a su lado.
Me llevaron de paseo a conocer el Barrio dos Muiños, conocido como la “Venecia” de Mondoñedo con sus canales y casas pintorescas y descubrí también la ponte romana do Pasatempo. Antón me explicó la historia cual juglar de la época. Que según el panel informativo que allí hay es la siguiente:
“Nesta Ponte conta a lenda , os Coengos da Catedral entretiveron a muller do Marichal D.Pedro Pardo de Cela ( nobre de finais do s.XV ) que traía un indulto dos Reis Católicos para o seu marido que estaba preso na Cidade á espera de ser axusticiado. Ao entretela aquí, esta non conseguiu chegar a tempo de entregalo polo que foi executado na Praza da Catedral o día 17 de decembro de 1483”
Cuantas cosas en la vida se pierden por no comunicarlas a tiempo .
Para recargar pilas, nada mejor que unas tapas en la Taberna do Valeco. Un lugar muy enxebre apuntado ya en lista de lugares a los que volver. Y de ahí, noche de luna casi llena, invierno… qué mejor lugar que ir a visitar que el cementerio. Esas cosas que solo haces si vas en compañía de alguien que te susurra al oído con voz tenebrosa “ haz una fotoooo” ( ¿eh Luz? )
O Cebreiro
Toda mi vida, en todos mis viajes a Galicia, he pensado que algún día me desviaría al entrar en Galicia e iría hasta O Cebreiro. Pero siempre eran tantas las ganas de llegar a la aldea después de un viaje tan largo que nunca paraba. Este invierno fui expresamente. Y creo que fue la mejor forma de descubrirla. Con un frio helador y casi sin gente.
Iglesia, cementerio, pallozas y frio. Galicia en estado puro. Si vuelvo que sea en invierno.
Visita a Samos
Hace años que quería conocer este monasterio porque tengo una relación especial con él. Fue uno de los lugares que aprecian en mi proyecto final de carrera y todavía guardo la correspondencia que mantuve con los monjes hace ya años cuando lo hice.
La visita sola ya da para un solo post, pero lo que más me gustó de ésta curiosamente esta fuera del monasterio: la portada de la iglesia, la vista exterior desde el paseo que lo rodea y un lugar que me pareció tan mágico como legendario: la Capilla del Ciprés. Dice la leyenda que capilla y ciprés llevan juntos más de diez siglos, en su parcela, inseparables. Piedra y madera, muerte y vida, juntos en contacto permanente, por los siglos de los siglos. Un lugar al que hay que acercarse y al seguro que volveré para estar un rato sentada allí meditando acerca de lo humano y lo divino.
A Mariña lucense en soledad
Una playa en invierno es un lugar de lo más inspirador. Si además es una playa solitaria de la costa de Lugo y solo te acompañan tus pensamientos , puede ser un lugar sanador y aplacador.
Tras un recorrido en coche por Rinlo, la penosamente abarrotada As Catedrais y demás playas del entorno, hice parada en Barreiros. Allí solo las gaviotas estaban vivas.
Y para hacer un break y volver a la civilización, un paseo y unos vinos por Ribadeo
De vinos por Lugo
Si hay algo que hago casi todas las veces que viajo a Galicia es salir de vinos por Lugo.. En cualquier época del año, es el mejor lugar para ir de vinos ( y tapas gratis ) que conozco. Hay varios lugares que suelo visitar siempre y algunos se han convertido en imprescindibles sí o sí. Uno es el Riba, en la Plaza do Campo, y el otro el Cinco Vigas , en la calle de la Cruz.
Eso hice el último día de mi estancia en Galicia. Arropada por parte de mi familia, un día de albariños, licor café , sifones y vueltas que dio para mucho.
Galicia siempre será especial , aunque llueva , aunque haga frio. Solo hay que saber buscar los lugares , dejarse llevar por las sensaciones y esperar que llegue la magia y la compañía de viaje perfecta.