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10 Experiencias únicas en Galicia

Hay un verbo que utiliza a menudo mi abuela que me fascina  :”soerguer”, algo que traducido al castellano vendría siendo “levantarse, erguerse”, pero en mi mente añado “ a lo bestia”. Algo que realmente te impresiona, te eriza la piel.  Yo este verano he decidido adaptar mi querido “soerguerse” a los tiempos modernos y lo he traducido en  #FeelingGalicious .

Como cada verano, y como siempre que la agenda me lo permite, me he escapado a Galicia de vacaciones. Y como siempre desde hace unos años , no he parado de recorrer el paraíso pintado de verde y azul  casi de punta a punta.

Como siempre, tenia en la cabeza muchos sitios a los que quería ir , y se han quedado pendientes para una próxima visita, y otros nuevos con los que no contaba se han añadido al planning, No se a ti, a mi me estresa un poco el hecho de estar tres semanas con las maletas a cuestas, cambiando de ubicación cada pocos días.. y más con un gato pequeño recién incorporado a la familia… No he podido disfrutar de mi Mestre todo lo que me hubiera gustado y no he hecho el camino de Reigadas en Sampayo.. Pero he vivido momentos inesperados y únicos de esos que , como diría mi abuela, “soerguen”.  Momentos Galicious….

Pozo da Ferida ( Viveiro, Lugo )

Pozo da Ferida ( Viveiro, Lugo )

Sin  duda, de todos, el que más me alucinó. Gracias a una recomendación de mi querido amigo Antón de Casa do Batan ( mío y de los gatos ) me acerqué a descubrir esta maravilla ubicada en la zona norte de Lugo. Tuve la inmensa suerte de no encontrar a nadie por el camino, un camino por en medio de la montaña, escuchando los sonidos del bosque. Yo que soy un poco torpe ( para que lo voy a negar ) conseguí llegar sin problema hasta el pozo.  No se si disfruté más con el trayecto o con el destino. Impresionantes los dos a partes iguales.  La sensación de que el tiempo se había detenido era totalmente real.

Termas Romanas (  Lugo )

A pesar de visitar Lucus Augusti siempre que voy a Galicia, nunca había visitado las Termas Romanas. Están en  el Balnerio de Lugo . Detrás de la recepción hay un pasillo, bajas unas escalera y hay dos puertas en las que se pueden visitar las termas. Otro espacio en el que el tiempo se para. Las instalaciones son pequeñas, pero te inducen a olvidar que encima de ellas transcurre el s. XXI

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A Domus de Mitreo ( Lugo )

Este verano he aprovechado para visitar varios museos de Lugo ( en un próximo post te cuento lo visto ) pero el que me dejó sin palabras fue sin duda la “Domus de Mitreo”, justo enfrente de la Catedral lucense. En ella puedes  ver los restos de una casa que fue seccionada por la mitad para construir bimilenaria  Muralla de Lugo.  Perdí la noción del tiempo contemplando los restos intactos del patio cruzado por los cimientos de la Muralla. Impresionante.

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Ruta de  Cabo Vilán al Cementerio de los Ingleses ( Costa da Morte. A Coruña )

Hace años descubrí esta carretera de casualidad. Este verano la he recorrido, desde Cabo Vilan hasta el Cementerio de los Ingleses, con la música de Ludovico Einaudi sonando en el coche. No es una carretera al uso ( no está asfaltada ) pero el paisaje merece la pena. El Faro de Cabo Vilan , el Cementerio.. parada obligada.

Desayunando en el Hotel Costa Vella ( Santiago de Compostela )

Después de la Catedral, la terraza de este hotel es uno de mis lugares de “visita obligada” siempre que voy a Santiago. Tiene algo mágico. A parte del encanto que ya de por si posee, para mi es especial porque siempre que voy me lo paso genial.  Si el verano  pasado vivía allí una tarde apoteósica de risas con mis amigos Cris y Robert  , el desayuno de este verano,  y la posterior sesión de tapeo  por Santiago fueron de lo más especial.  A mí me sigue vibrando el pensamiento desde entonces.

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Una  1906 al lado del Rio Xallas ( Ézaro, A Coruña )

En  mi recorrido por la Costa da Morte, no podían faltar al visita al mirador del Monte Pindo y al bajar la visita a la Cascada del Ezaro. Antes de visitar esta última, aparqué el coche justo delante del rio Xallas,( buscando una sombra para que mi pequeño acompañante felino no se quejase ).Al lado mismo había instalado el típico chiringuito de helados , con sencillas tres mesas. La experiencia “de lujo” de ese momento fue poder tomarse una #exageradamentebuena 1906 sentada al lado del rio. Con el murmullo de la cascada de lejos, debajo de unos árboles….  Esos momentos que no se pagan con dinero y que te hacen ver con qué poco se puede ser feliz.

Camino de Meiroi ( Ribeira de Piquin, Lugo )

En una de mis idas y venidas a la aldea y como me gusta mucho perderme por carreteras estrechas  , apenas transitadas y rodeadas de arboles, tomé esta carretera antigua que transcurre por un tramo de la Ribeira de Piquín. Sentí la misma sensación  de “majestuosidad” al girar la curva de los arboles altos ( como yo la bauticé en mi mente cuando era niña). Paré el coche para contemplarlos. Otro momento de paz y desconexión del mundo.

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Puesta de sol en Finisterre  ( Finisterre, A Coruña )

El destino (la buena suerte y una inmejorable recomendación ) quiso que cuando me dirigía ver la puesta de sol en Ézaro cambiara de rumbo y me dirigiera a Fisterra. Fue una carrera a contra reloj con el sol para llegar. Aparcar coche, coger las cámaras y cervezas del maletero y trotar hasta el faro de Fisterra para ver la puesta de sol. ( No me esperaba tal aluvión de gente, aquello parecía Ibiza ) .El momentazo lo viví cuando mientras el sol se ponía un gaiteiro entonaba el Himno Gallego. Los pelos como escarpias. Lágrimas de emoción.

 Bajando el Grandón (  Mestre, Ribeira de Piquín. Lugo )

Al principio de mis vacaciones tuve la suerte de poder recordar parte de los veranos que con tanto cariño recuerdo en Mestre, cuando bajar la carretera que lleva de la aldea de Mestre hasta la  LU P 4802 era una de mis diversiones. Pasear bajo esos túneles de árboles, respirar el aire de la Ribeira de Piquin…. #FeelingGalicious total. Y más con la inmejorable compañía que llevaba.

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Revelaciones en Casa do Batán ( Chavín, Viveiro, Lugo )

Como colofón de las vacaciones, reservé una de mis últimas noches en Galicia para ir a Casa do Batan. Qué decir que no  haya dicho ya de Luz, Antón, la casa, los desayunos bataneiros y #condocemebastan. Una velada de lo más divertida y al día siguiente gracias a sus indicaciones, una de las que más disfruté de todo el verano: O Avó, o Pozo da Ferida…. Cuando paseaba por la finca alrededor de la casa, tuve más claro que nunca que yo quería una casa así, pero para vivir. Objetivo casa de piedra. #FeelingGalicious

Hubo otros momentos muy especiales, como una noche en Lugo de fiesta con casi todos mis primos Castelao ( nos faltó la “pequena”  ), de esas que pasaran a la historia familiar de tanto que nos llegamos a reir , el desayuno de la mañana siguiente con dos de “mis”  personas más importantes o el día que pase sin salir casi de la casa de Mestre en el que terminé llorando a moco tendido mientras escribía mi post de la semana pasada. Tampoco olvidaré mi visita de este año a la ermita del San Pedro Fiz ( Genial Alfonso 😀 )

Algunas personas dicen de  mí que soy muy sensible…yo creo que lo que me pasa es que siento Galicia de una forma muy especial.  Toda yo soy #morriña. Galicia me “soergue”.

Esperando a mi próxima visita.

#FeelingGalicious

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Mónica Castelao

Necesito sentir para escribir. Me gusta escribir con el alma. Barcelonesa de nacimiento y gallega de sentimiento. Mis padres son los culpables de esta pasión por la tierra que los vio nacer. Y esa tierra, Galicia, es la que hace brotar mi particular forma de escribir. Profesora de Turismo y Marketing. Enamorada de Ribeira de Piquín.

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Sobre la autora

Turismóloga reconvertida en Profesora de Turismo y Marketing | Bloguera | |Enamorada de Ribeira de Piquín | Fan de a-ha y de los gatos negros.